El torito de hierro pone en jaque a The Ring.

Hay un corre-corre en las oficinas de Ring Magazine. Considerada por muchos “La Biblia del Boxeo,” la revista The Ring muchas veces dicta quién es el verdadero campeón en las distintas divisiones, a parte de nombrar a los famosos “mejores libra por libra del mundo.” . ¿Y por qué es tan importante lo que diga Ring Magazine? Porque en un deporte donde existen tantos organismos entregando fajas a diestra y siniestra, alguien tiene que pararse en medio del desfile de cueros con enchapados en dorado para decir, “de todos ustedes, tú eres el campeón.” Y acá entre nosotros, esa gente realmente saben lo que están hablando.

Dicho esto, se preguntarán que ha provocado el caos en la revista. Pues resulta que sólo hay tres formas en que un campeón pierda su lugar en el pilar más alto de la revista: 1) Que el boxeador se retire. 2) Que se mueva a una nueva división. 3) Que pierda una pelea de campeonato. Iván Calderón acaba de darle una sacudida a sus listas en 2 de esas tres categorías.

Con su apretada victoria ate el gigante y poderoso pegador Hugo Cázares, el “Iron Boy” no solamente sube a las 108 libras luego de reinar invicto en 28 encuentros en las 105, si no que se apunto la victoria del debut venciendo al campeón. El escurridizo estilo de Calderón no solamente le sirvió para evitar los potentes puños del mexicano, sino para esquivar las críticas de una revista que luego de 203 semanas en el primer puesto en las 105 libras, nunca le concedieron el título de campeón. Ahora el toma y dame de Calderón venció al campeón de Ring Magazine en las 108 lbs. Lo que obligará a la revista a reorganizar sus listas.

Tal vez argumenten que Calderón sólo tiene 6 knockouts o que en un momento de la pelea estuvo en peligro de perder por KO, sin embargo el boricua demostró su cría e impuso su juego en toda la batalla. Muchas veces crítico a los boxeadores técnicos, no por que no me guste la técnica, si no por que su estilo no agrada a la vista de la gente que quieren ver golpes contundentes (y esa es la gente que paga para mantener el deporte vivo). Sin embargo Calderón hace que correr se vea muy divertido. El guaynabeño es tan rápido que parece sacado de una película de The Matrix. Muchas veces se le veía desaparecer de al frente de su oponente pero si pones la secuencia en cámara lenta notarás como en menos de un segundo el maestro se detiene a ver el puño del contrincante pasarle a centímetros de la cara, luego se disfruta la cara de frustración del oponente, pasa a regalarle un golpe y termina apareciendo al otro lado del cuadrilátero.

Por eso los fanáticos en el Coliseo Ruben Rodríguez correaban a coro “Olé, Olé” pues más que match de boxeo la pelea por el título parecía una corrida de toros. Y para satisfacer el morbo en cada uno de nosotros, esta vez el toro ganó.

La decisión fue clara. Una votación de 115-112 y 115-112 para Calderón y 116-111 para Cázares. Existe un nuevo campeón invicto en las 108 lbs. Ya es hora Ring Magazine. Honor a quien honor merece.